La Cuarta Pieza del Rompecabezas
Hay una vieja historia sobre un granjero que se rehusó a comprarle a un vendedor ambulante un nuevo libro sobre técnicas de cultivo.
Cuando el vendedor le preguntó por qué no estaba interesado, el granjero respondió:
«Yo no estoy cultivando ahora ni la mitad de bien de como yo sé hacerlo»
El granjero estaba usando menos de la mitad de la información que ya tenía disponible para él.
Ciertamente no sentía la necesidad de más.
En un sentido real, él tenía más respuestas que preguntas para hacerse.
Dentro de cualquier cuerpo de información, ya sea un libro o nuestra mente consciente, siempre hay ideas que podemos relacionar y otras muchas que no.
Cuando relacionamos las ideas, las conectamos a nuestra propia experiencia de tal modo que ellas se vuelven para nosotros reales y significantes; sabemos cómo actuar con ellas.
Las ideas que no podemos relacionar nos dejan impasibles e inseguros sobre cómo actuar.
El uso de nuevas ideas requiere experimentación.
Pero la experimentación podría fácilmente resultar en un fracaso para lograr las metas deseadas, o peor aún, podría producir consecuencias imprevistas con efectos negativos en nosotros mismos y nuestro negocio.
Esto implica un dilema y un riesgo potencial para individuos que están siendo presionados para hacer mejoras.
Esto propone un riesgo adicional para aquellos vistos como líderes porque las culturas organizacionales esperan que los líderes tengan respuestas y sepan que es lo próximo que hay que hacer.
Para mantener un nivel prudente de seguridad, la línea que trazamos entre lo que estamos listos a intentar y lo que no, está casi siempre trazada bien arriba sobre el territorio conservador.
Me gustaría introducir un concepto llamado:
«Las cuatro piezas del rompecabezas».
Supongamos que tenemos las tres piezas de un rompecabezas de cuatro piezas.
El modo de ver el panorama completo es unir todo el rompecabezas.
Pero hemos perdido la última pieza, el cuarto segmento o sección.
.
La primera pieza :
El rompecabezas representa las ideas que podemos relacionar y estamos deseosos de usar.
Entendiendo y usando estas ideas, la primera pieza, nos es posible encajar la segunda sección.
La segunda pieza:
Representa nuestras acciones resultantes de las ideas representadas, o contenidas, en la primera pieza.
Cuando juntamos la primera y segunda pieza nos presentan un cuadro claro de la realidad , dándose una a la otra un más profundo significado.
Ellas conforman el comienzo de un sistema de creencias y prácticas.
La tercera pieza:
El rompecabezas representa las ideas que no podemos relacionar.
El valor y la aplicación de estas ideas no ensayadas ni experimentadas están cuestionadas, no queda claro como ellas encajan.
Esta tercera pieza parece que puede ser acomodada de varias maneras, pero usted comienza a preguntarse si ella pertenece o no al rompecabezas en absoluto.
La cuarta pieza:
El rompecabezas representa las acciones futuras resultantes de las nuevas ideas contenidas en la tercera pieza.
Si sólo pudiéramos ganar un poco de experiencia con las ideas representadas por la tercera pieza del rompecabezas, sería posible entonces deducir cómo la tercera y cuarta piezas encajan con las dos primeras.
Son imprescindibles nuevas experiencias para formar un nuevo sistema de creencias y prácticas con respecto a la tercera y cuarta piezas del rompecabezas.
Son indispensables nuevas experiencias para incorporarlas al sistema más grande que está representado por el rompecabezas completo.
Sólo así podremos ver el panorama completo.
El sabio comerciante practicante no pone de buena gana en riesgo su empresa comercial por causa del aprendizaje de la :
«Cuarta pieza».
El nuevo libro que el granjero rehusó comprar podría haber tenido buena información para él.
O podría haber agregado confusión introduciendo aun más ideas que el granjero no podía entender ni estaba deseoso de arriesgar probándolas.
Hasta que las nuevas experiencias brinden conocimiento , sabiduría y visión,
Una gran porción de lo que nosotros ya sabemos se sienta a esperar, como un libro que no podemos comprender.
Entonces, como nuestro granjero,
¿Por qué sentiríamos la necesidad de más teorías que no podemos relacionar?.
Hasta que las nuevas experiencias traigan significado a nuestras ideas sin usar, ellas no podrán ser examinadas ni podrán ser puestas en práctica.
¿Qué puede suceder durante un entrenamiento que utiliza el Sistema de Aprendizaje Interactivo Experiencial Integral ?.
La generación de un lugar seguro donde probar la acumulación de ideas no experimentadas.
Un lugar donde podemos experimentar cómo las ideas podrían aplicarse, combinarse, refinarse, y llevarse a cabo.
Un lugar donde sea seguro experimentar sin arriesgar los negocios ni la credibilidad.
El Sistema de Aprendizaje Interactivo Experiencial Integral le da significado a las ideas no utilizadas, haciendo así posible rechazar algunas abiertamente e implementar otras.
Comenzaremos a buscar nuevas ideas adicionales porque tendremos más preguntas que respuestas.
Las preguntas persistentes traen sed por nuevas ideas.
Ellas abren las puertas a más grandes oportunidades para la experimentación, comprobación y reflexión.
La imagen formada por todas las piezas de nuestro rompecabezas, que finalmente encajan juntas, nos proporciona un claro entendimiento de:
Dónde estamos, dónde queremos ir, y cómo llegar allí.
Esta fase de aprendizaje y conocimiento es de lejos más esperanzadora que aquélla en la que se encontró el granjero, teniendo más respuestas que preguntas.
Nuestras propias preguntas, no necesariamente la de los otros, nos conducen a buscar nuevas respuestas.
Dr. Mario Rosen
Médico (UBA)
Fundador y Director Médico de Columbia Training System
Sistema de Aprendizaje Interactivo Experiencial Integral
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