Quiero Recuperar las Esperanzas – Alejandra Stamateas 1/3

Quiero recuperar las esperanzas
Por Alejandra Stamateas

Romanos 5: 5-6
Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado. A la verdad, como éramos incapaces de salvarnos, en el tiempo señalado Cristo murió por los malvados ¿Cuáles son las tres características principales de una persona saludable? Una persona que tiene salud mental, salud emocional, tiene tres características fundamentales: Ilusión, Coraje, Esperanza.

Ilusión: Una persona es feliz cuando se puede ilusionar por cualquier cosa, ya sea con un evento grande o con un evento pequeño, pero esa persona vive ilusionada; dice: ¡Qué lindo! voy a tener un cumpleaños, ¡Qué lindo! hoy voy a ir al parque a tomar mate ¡Qué bueno! hoy voy a hacer tal cosa, y esa persona vive ilusionándose, esa persona tiene más salud emocional que otra persona que ya no se ilusiona por nada.

Coraje: Es poder pelear las batallas de la vida. Es tener la capacidad de poder pelear por algo que querés, no por cualquier cosa, sino por algo que vos creés que es importante. Hay gente que se le alarga la vida porque pelea por todo; por ejemplo: va a la verdulería y pelea por el precio de la verdura y dice: déjemela $5 menos, y regáleme un poquito de perejil, y esa pelea por algo pequeño, que parece simple y sencillo, a esa persona le da vitalidad.

Como muchos viejitos que van a cobrar la jubilación al banco y vos decís: pero se podría quedar en su casa, podría hacer un poder para que vaya otro a cobrar, pero esa persona lo hace porque siente que revive, que tiene algo importante, tiene que salir de su casa, tiene que ir al banco, en nuestro país tiene que esperar tres horas afuera con 40º de calor, nadie le alcanza agua pero para ellos fue toda una experiencia de lucha y si logró cobrar es el éxito máximo, pero para esa persona luchar por esas pequeñas cosas, o tal vez luchar por grandes te mantiene en actividad y saludable.

Y otra de las cosas que tiene una persona saludable es esperanza.

Esperanza: Optimismo. Levantarte cada día y saber que algo bueno te va a pasar. Y eso es lo que tenemos que recuperar las mujeres y por qué no, los varones también, levantarnos cada día de nuestra vida y saber que a mí hoy algo bueno me va a pasar. La esperanza no nos avergüenza.

¿Cómo activamos esa esperanza todo terreno?

 Que pase lo que pase, igual seguimos conservando la esperanza y en éste pasaje dice que, la esperanza no nos defrauda o sea, una mujer o un varón que se ata a la esperanza aunque no vea nada, nunca va a ser defraudada. ¡Eso es impresionante!, o sea, tal vez te defraude la gente, tu país, los amigos, el gobierno pero una persona que se tomó de la esperanza, dice la Biblia, nunca pero nunca será defraudada.

Ahora, ¿por qué tenemos que tener esperanza?

Porque la esperanza siempre te rompe los límites internos que tenés. La esperanza siempre te va a quitar la medida que todos usamos, todos tenemos una medida con que medimos nuestra vida, nuestra capacidad, nuestras posibilidades. Cuando decimos, quiero preparar esto para las fiestas, vos medís si la plata te alcanza o no te alcanza; cuando vos vas a comprar regalos, quisieras gastar más y tal vez no tenés; porque vos querés comprarle a todo el mundo y tal vez no te alcanza la plata para eso; porque no sabés si lo que compraste le va a gustar o no; y eso estresa muchísimo. O sea, siempre tenemos medidas para medir todo en nuestra vida.

Una vez estaba el profeta y dice: yo voy a ir a medir la ciudad; y viene un ángel y le dice a otro ángel: no, no, no, no vas a ir a medir nada porque ésta ciudad no tendrá muros. Y quiero decirte que, Dios el día que vino a vivir a tu vida te dijo: Si yo entro, si yo puedo entrar que soy el dueño de todo, en tu vida no va a haber muros, no va a haber límites, podés extenderte mentalmente, físicamente, hacia donde quieras, porque yo te voy a acompañar, en mí no hay límites posibles.

(Continuará)

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